Las entidades sociales exigimos políticas de empleo responsables que garanticen el acceso a trabajos dignos

Que todas las personas tengan condiciones laborales dignas es un pilar fundamental para evitar la exclusión social y avanzar hacia una sociedad más justa y cohesionada. Sin embargo, el 10 % de la población catalana que trabaja se encuentra en riesgo de pobreza, según el informe INSOCAT (2025) publicado por ECAS (Entitats Catalanes d’Acció Social).
Ante esta realidad, las 67 entidades que conformamos la Comisión de Inserción Sociolaboral de ECAS hemos puesto en marcha una campaña bajo el lema:
“La protección de la salud es un derecho básico, el trabajo digno también”,
para reivindicar el acceso al trabajo digno como pilar esencial para la cohesión social, así como el papel clave de las entidades sociales en la promoción del empleo de calidad en Cataluña.
Durante el mes de mayo de 2025, las entidades de ECAS hemos sido informadas de que el SOC (Servei d’Ocupació de Catalunya) dejará de impulsar el programa de ocupación SINGULARS, que a través de la acción de entidades sociales especializadas y centros formativos, acompaña cada año a más de 3.500 jóvenes no ocupados ni integrados en los sistemas educativos reglados. La eliminación de este programa deja a un colectivo altamente vulnerable en una situación grave de desatención.
“Es una demostración más de la falta de legitimidad, interlocución y financiación que sufrimos las entidades de inserción sociolaboral en Cataluña.”
—Esther Sancho, coordinadora de la Comisión de Inserción Sociolaboral de ECAS.
A esto se suma que, en los últimos años, algunos programas públicos de inserción sociolaboral, como el MAIS (dirigido a personas receptoras de la Renta Garantizada de Ciudadanía), han endurecido sus condiciones, principalmente a través de la reducción en la duración del acompañamiento y de la exigencia de resultados de inserción rápida.
En este contexto, las entidades de ECAS hemos elaborado el documento:“El rol del tercer sector en las políticas activas de ocupación en Cataluña. ¿Hacia un nuevo modelo de concertación?”,
que será entregado a representantes políticos para reivindicar el papel complementario que deben tener las administraciones públicas y las entidades sociales en el desarrollo de las políticas activas de empleo en Cataluña.
“Las entidades no podemos hacer un trabajo de calidad. El recorte de programas de inserción sociolaboral aboca a las personas desempleadas a empleos precarios.”
—Sonia Moragrega, miembro de la Comisión de Inserción Sociolaboral de ECAS.
El documento subraya la necesidad de incorporar una perspectiva social en las políticas de empleo, que garantice respuestas personalizadas a colectivos en situaciones especialmente complejas. Esto implica reforzar los espacios de diálogo y co-construcción de políticas públicas, y dotar con más recursos los programas de inserción sociolaboral.
Cada año, las entidades sociales de ECAS atienden a más de 100.000 personas en Cataluña a través de programas de formación e inserción, lo que demuestra la experiencia y flexibilidad necesarias para ofrecer respuestas adaptadas a la diversidad de la población.
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